El 14 de febrero de 2006 se dieron a conocer en los medios de comunicación, una serie de grabaciones telefónicas que sostuvo el gobernador de Puebla Mario Marín Torres con diversos personajes presuntamente implicados con pederastia y abuso infantil. El sesgo de las conversaciones giran en torno a la detención de la periodista Lydia Cacho y como fueron violentados sus derechos constitucionales con la participación de diversos actores políticos, los cuales siguen en sus puestos orgullosamente y a la fecha este caso sigue abierto.
Estos personajes llamados Kamel Nacif y Zucar Kuri fueron los protagonistas de haber violado, abusado y traficado con mujeres y niñas menores de edad, lo cual la periodista Lydia Cacho fue destapando conforme convivía con testigos y victimas de estas personas, de hecho escribió un libro llamado “Los demonios de Edén”, en donde da a conocer los hechos de cómo comploteaban estas dos personas ayudadas por Mario Marín.
El 29 de noviembre de 2007, por seis votos a favor, los diez ministros de la SCJN acordaron que no hubo violación grave a los derechos individuales de la periodista Lydia Cacho.
En diciembre de 2007, el tribunal fallo a favor de Mario Marín, pues se encontró que las pruebas fueron hechas y no grabadas de la conversación original.
El gobierno de puebla aun sigue encabezado por esta persona que lejos de ser un ejemplo, ha sido un infame que representa a la ciudad de Puebla y en la cual nadie ha podido quitar gracias al encantador gobierno que México ha impuesto y ha tapado, dejando como cabezas a gente que trafica, roba, miente y solo piensa en el crecimiento económico del mismo.
Debido a que nuestro gobierno pasa por alto este tipo de situaciones, es de suma importancia que la sociedad no se comporte con la misma indiferencia que este lo hace.
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